CONTROL DE PRECIOS & CENSURA INDIRECTA

Una imagen que no veremos por mucho tiempo de aprobarse el Tratado con el Estado Terrorista de Irán

Mientras en la Cámara de Diputados se juega el destino argentino de las próximas décadas, y porque no decirlo la paz y tranquilidad del país, con la discusión de un Acuerdo de Entendimiento con Irán que ya se ha develado como una alianza estratégica con un estado terrorista, otro sector del gobierno continúa con sus ataques a la prensa libre.

La prohibición a los supermercados de publicitar sus ofertas en los diarios afecta de lleno a Clarín y La Nación, fundamentalmente porque a esos medios también se les ha retaceado indignamente la pauta oficial que ha sido distribuida generosamente entre los medios adictos.

Esta claro que el periodismo militante se ha convertido en un excelente negocio, máxime en estos tiempos que vemos viene acompañado de alguna cuota de impunidad para los siniestros automovilísticos.

En términos más técnicos el Poder Ejecutivo esta violando una vez más la Constitución Nacional, en este caso el artículo 14 cuando garantiza el derecho de los habitantes a publicar sus ideas por la prensa sin censura previa. Quitar fuentes de financiación a los medios que no son adictos al régimen imperante se denomina “censura indirecta”.

La Corte Suprema ha decidido hace años que el amparo constitucional a la libertad de prensa sin censura previa se extiende al derecho de empresa de los medios de comunicación, de donde un ataque a ese derecho, como las medidas que venimos comentando, representan un claro ataque a la libertad de pensamiento.

Ministro de la CSJN Fayt

El juez Fayt señaló en el caso “La Prensa” que correspondía “garantizar que la empresa periodística esté en condiciones de cumplir su misión de informar a los ciudadanos y al propio Estado, fiscalizar el ejercicio del poder estatal, y educar y formar mediante la crítica social y educacional”,  esto es lo que la Corte Suprema de los EEUU ha denominado dimensión estratégica de la libertad de prensa, no sólo la libertad de expresarse y publicar ideas, sino el derecho de la sociedad de enterarse a través de esas publicaciones de los que esta sucediendo,  de lo que hace el gobierno.

En la actualidad, por una vía oblicua, el Poder Ejecutivo se asegura restar ingresos y poner en aprietos a dos diarios que han mantenido un posición de independencia frente al gobierno kirchnerista. No existe resolución administrativa ni decreto que se motive en dichas razones, sin embargo el uso arbitrario que Moreno viene haciendo de sus facultades, a instancias del Poder Ejecutivo, constituye una clara desviación de poder que resta toda legitimidad jurídica a la medida y que sólo encuentra eficacia en el miedo a las consecuencias que encierra desobedecer las decisiones de ese funcionario.

Tal es así, que se esta estudiando dar ciertas ventajas a los supermercados que hayan obedecido la ordenes verbales de este personaje, fundamentalmente mantener congelados los precios y no hacer publicidad en los medios de las ofertas, premios que no gozarán aquellos que no se hayan alineado decididamente a las disposiciones morenistas.

Ciertamente resulta inconcebible como es posible que existan personas con ideas tan retrogradas y ridículas, probadamente inútiles y base de costosos fracasos, como pensar que el “mercado” puede manejarse desde un escritorio y disponer el valor de las cosas divorciado de los costos de producción y de la oferta y demanda de esos productos.

Si de buenas intenciones esta empedrado el camino al infierno, de idiotas debe estar plagado dicho sendero, no hay duda.

Como vemos la batalla por los medios no ha terminado y promete traer nuevas escaramuzas, por lo pronto veremos que hace Marcelo Tinelli, que tan suculento será el plato de lentejas que le ofrezcan por pasarse a Telefe y cual su templanza para evitar convertirse en un colaboracionista más.